23 marzo, 2025

Disfruta de la gastronomía española en un asador Madrid

Para nadie es un secreto que España es uno de los países con más cultura gastronómica, su diversidad geográfica hace que su comida sea increíblemente variada, siendo famoso desde una espectacular paella Valenciana con mariscos y moluscos de primera calidad, hasta asados de carnes rojas, de cerdo y cordero, preparados en horno a leña de encina. Estos platos son las especialidades de un buen asador Madrid y uno de los más característicos es el lechón asado.

El lechón o cochinillo debe tener ciertas características importantes para que cumpla con las exigencias de calidad de los mejores restaurantes españoles. En primer lugar no debe tener más de 20 días de nacido y la única alimentación que se le proporciona es leche materna, de esa manera se conserva la ternura de la carne, así como el sabor original y tradicional del cochinillo.

En todas las provincias de España se conoce el cochinillo o lechón asado, sin embargo, es probable que su preparación se destaque más en las tierras de Castilla, resaltando como la más popular y tradicional “el cochinillo de Segovia”. No obstante, se ha extendido tanto que hoy en día es difícil decidir dónde degustar el mejor plato, ya que en Madrid y algunas localidades manchegas también se disputan el mejor lechón asado.

 

asador madridDel mercado a la mesa

La popularidad de los cochinillos en los mercados y carnicerías es muy común, normalmente se exhiben colgados de un gancho para demostrar la totalidad del cuerpo, es una imagen típica del mercado de la cebada en Madrid.

Su preparación es bastante simple, el primer paso es la limpieza, el cochinillo se abre y se limpia de todos sus órganos, excepto los riñones posteriormente se adoba o se condimentan las partes, y este marinado por lo general bastante simple se deja durante dos días, llega el momento de asar la carne en un horno a leña de encina y que la misma grasa del cerdo sirva para aportar sabor.

Probablemente, la forma más típica de presentación es colocarlo completo en la mesa y con una manzana en la boca, su piel debe estar crujiente y su carne tierna y si lo acompañas con vino blanco podrás degustar de un plato típico por excelencia de un asador Madrid.