25 abril, 2025
waste water treatment

Waste water treatment: imitando a la naturaleza

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El agua es un compuesto con una composición química sencilla de dos átomos de hidrógeno y uno de oxígeno. Posee muchas propiedades interesantes, entre ellas, ser una de las sustancias más comunes y uno de los recursos de mayor importancia para todas las formas de vida conocidas en el planeta. Y es gracias a un waste water treatment que podemos seguir reutilizándola con éxito en la actualidad.

A pesar de ser tan común, el total disponible para beber, es decir, la llamada agua dulce, en la forma de ríos y lagos, representa solo un porcentaje muy pequeño. El resto está congelado en los polos o saturado con sales en los océanos.

Además, el ciclo hidrológico, proceso natural de evaporación, condensación y precipitación, ya no tiene capacidad de eliminar todos los contaminantes y patógenos que se encuentran presentes en ella en cantidades peligrosas para la flora y la fauna.

Plantas de tratamiento de aguas residuales

En líneas generales cumplen dos propósitos: purificar el fluido vital al máximo haciéndolo apto para el consumo humano, o limpiar suficientemente los efluentes de lluvias, alcantarillas y demás estructuras que intervengan, de modo que al devolverla a las fuentes naturales no altere el ecosistema local.

Aunque las técnicas pueden llegar a ser diferentes, los principios básicos a emplear son los mismos:

  • Pretratamiento: se combinan múltiples barreras, cada una más fina que la anterior para remover los desperdicios y restos de gran tamaño; siendo, en este orden, basura (desbaste), tierra (desarenador) y grasas flotantes (desgrasador).
  • Como aún podrían haber partículas suspendidas, se busca que se concentren para poder retirarlas, ya sea sedimentándolas, precipitándolas o coagulándolas. Esto puede suceder por tiempo, o añadiendo reactivos para acelerar el proceso.
  • A continuación, si todavía quedaran elementos orgánicos, se dispone de una amplia gama de opciones para eliminarlos según el objetivo final perseguido. Por ejemplo: oxidación aeróbica con fangos activados, o liberación de bacterias anaeróbicas que se alimentan de estos componentes.

Dependiendo del nivel de calidad que se quiera obtener se repite cada etapa tantas veces como sea necesario. De esta manera, gracias a las plantas de tratamiento de aguas residuales, aportamos al mundo en vez de consumir y desechar indiscriminadamente.